Chiquitico Faget

Aquellos que le temen a muertos y aparecidos como yo,
 les recomiendo no leer…

Dicen que chiquitico Faget lo había advertido y no le habían hecho caso, pero lo que nadie pudo sospechar que aquel seria el ultimo día en el pueblecito que fue envidia de los vecinos mientras fueron prósperos, las sembrados daban cosechas y todos venían a sus ferias y les compraban los dulces en conservas de la tía Ñica, que era un secreto de familia muy bien guardado por cientos de años, pero que ahora ya nadie se acordaba y hasta dicen le robaron el secreto y la pobrecita no se lo pudo llevar a la tumba ¿Quién se acordaba ya de eso? Allí solo quedaba una docena de familias porque sin saber si hubo un acuerdo o no entre los pobladores, dejaron de reproducirse desde hacía más de 200 años.

 El misterio de como sobrevivieron algunos para hacer el cuento, otro ¿Por qué dejaron de nacer niños entre ellos? A nadie parecía preocuparle hasta ese preciso día de agosto cuando Chiquitico lo descubrió pero ya era tarde casi todos se habían extinguido por ley natural, o no natural porque desobedecieron las santas escrituras de creced y multiplicaos, las razones las supimos muchos siglos después, también se pudo averiguar que de los 1 552 abortos del pueblo, Chiquitico Faget había realizado 1501, los otros corrieron por Ramona, la comadrona que nunca quiso prestarse para las cosas sobrenaturales que flotaban en el aire enrarecido del pueblo, no eran secretos estaban naciendo fenómenos desde el día que la mata de mangos se nego a parir. .
¿Cuándo fue que apareció el primer transgénico? Nadie se dio cuenta porque ya venían naciendo con ciertas anormalidades como narices a lo Pinocho que al principio fue como una advertencia para los mentirosos del pueblo, empezaron a cuidarse de las mentiras, después labios más gruesos que los de Angelina Jolie, ya cuando empezaron a aparecer los pies de monos, los dientes de tiburones y hasta de cocodrilos, empezaron las sospechas del otro mundo, el de los marcianos, los terribles extraterrestres, todavía nadie había pensado en Chiquitico Faget, aun no sabían lo que les esperaba y comenzaron a ocultar a los niños malformados pero cada día eran más los que llegaban y comenzaron las habladurías y los mitos por todo el pueblo.

Algunos historiadores cuentan que ellos solos se fueron apartando y otros que la tierra les dejo de dar frutos pero lo más generalizado era la presencia de un ser malvado que había llegado desde otro mundo cargado de experimentos que puso en práctica enseguida entre los ingenuos pobladores, hasta el momento felices almas que solo consumían lo que la tierra les regalaba en cada cosecha.

Contaban que habitaba en aquella casa santuario de Chiquitico Fagot, que fue en su apogeo la más visitada por los que buscaban remedios a sus males porque lo mismo, él les curaba de una borrachera que de un mal de ojos y hasta dicen que erradico la viruela del pueblo, era brujo y hacia entuertos, revivía muertos, santiguaba y leía las cartas, tiraba caracoles, de todo. No todos lo querían porque muchos le huían por eso de las brujerías que sabían muy bien que las hacía y sus tratos con los muertos, sus visitas al cementerio donde se robaba los cadáveres acabaditos de enterrar, cuando los familiares regresaban a la tumba encontraban su huella y se decían, por aquí paso Chiquitico, la cosa fue que los más prudentes empezaron a enterrar a sus difuntos sin dientes pero los cascarrabias a la hora de morirse pedían irse con todo y allí aparecía el brujo del pueblo, dicen que solito que después lo acompañaba un hijo que adiestro en todas sus artes, los más descreídos y prácticos contaban que era para sacarles los dientes de oro y luego venderlos en La Habana.

 Otros cuentan historias horrendas que paran los pelos de punta como cuando lo oyeron hablar con la diosa del cementerio, Santa Ifigenia, que aparece a las 12 de la noche siempre era lo mismo por ahí ni pases y si tienes que pasar coge la acera de enfrente y así fue como un día descubrieron las algas que salían por los rincones de la casa de madera, eran verdosas con vetas rojizas como de venas por donde se suponía corriera la vida del gigante que se alimentaba de alimañas y de monstruos transgénicos que ni el mismísimo Alan Poe se imaginó nunca, el extraterrestre y hasta llegaron a decir que se trataba del propio Chiquitico Faget y como ya no cabía dentro de la casa, comenzaba a salir en pedazos por todas las rendijas, fue cuando Chiquitico Faget desapareció de la faz de la Tierra, la idea de la abducción empezó a propagarse entre los pocos que habitaban en el pueblo.

georgina miguez lima ©
  

Comentarios

  1. Cómo no quería qué me saliera Santa Ifigenia a las 12 de la media noche, aquí estoy comentando tu maravillosa historia, qué tanto me recuerda a mi niñez. También teníamos una casa encantada o embrujada en el barrio, que nos subía la adrenalina pasar corriendo para probar quien era más valiente. Gracias Gini no dejes de traernos tus historias qué tanto nos hace soñar y qué magistralmente relatas, Felicidades

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  2. Amiga, aquí estoy embrujada, ese Chiquitico Faget existió, no cambie ni el nombre, mi madre le gustaban, como a mi estas historias y las contaba, les añadía y yo las reciclo ahora le añado algo y salen los transgénicos. Conocí la casa, yo me fui chiquita del pueblo pero me lo llevé.

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  3. Menos mal qué leí qué habías puesto una historia algo tenebrosa y vine temprano al blog para deleitarme leyéndola, porque ya de por sí tengo problemas con el sueño y no quería hacerlo tarde en la noche....Increíble imaginación la tuya Gini, gracias por hacer volar la nuestra. Felicidades, qué bueno qué al irte del pueblo te llevaste éstas historias....

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