"Oda a Oswaldo Payá."
En tu memoria se dirán cosas bellas,
honestas, patrióticas y profundas,
esas que nunca olvidará tu gente, tu pueblo. L.V
Una lágrima de sangre corre en tu mejilla!
Llora la patria por la muerte de unos de sus hijos.!
Lo han asesinado los traidores...!
Le han quitado la vida injustamente...!
Le han dado muerte unos villanos...!
Lejos canta mi alma enlutando el cielo de mi tierra,
y en la distancia mis versos perforan el silencio
para que mi pena y la tuya
sean dos alas que aún puedan volar
por encima del dolor.
Han callado una voz sin miedo,
para resucitar a un mártir,
para resucitar a un verdadero héroe.
Sabe la verdad que nadie enterrará
tan fácilmente tu nombre, Oswaldo Payá,
aunque cómplice la maldad con el demonio
sepulte el cuerpo de un mortal,
por causas de la manos impías
de esos tiranos que imponen el miedo
en nuestra Cuba bella,
durante más de medio siglo...
Escucha como gimen las palmas, miles, millones!
Acaso no las escuchas como yo?
Oye como sollozan los arroyos por ti,
abundantes, inquietos.
Acaso tampoco no los escuchas tú?
Hoy que cubano no inclinará su rostro
con un pésame eterno por tu abrupta despedida,
aunque sea un vil cobarde o un valiente más?
Tu valor que no fue de espuma ni corales,
se ha convertido en el mar del Caribe
que por siempre bañará con cristalinas aguas
a nuestra adorada Isla.
Qué pena tan inmensa escribir estos versos,
pensando que no pudiste llegar
ni al pedestal, ni al primer peldaño
de la libertad de nuestra patria.
Una oda mayor, con silabas menores,
con el estruendo de mis dedos,
invocarán sin estatuas, sin monumentos
a tu memoria inolvidable.
Cuántas horas y cuántos años de tu vida
sacrificaste a cambio, de la paz, la libertad
y los derechos de nuestro pueblo oprimido.
Incontables horas,
horas infinitas,
detrás de los bastidores,
detrás de esas carpas,
delante del telón,
en las trincheras del miedo, del valor,
del infortunio, por una idea, por una causa,
justificada sin laureles, con pocos galardones.
Si puede más la muerte que la vida,
más el odio que el amor,
más la mentira que la verdad,
más el poder corrupto que la gloria merecida,
más el miedo que el valor,
más los intereses que la honestidad,
y más el pecado que la obediencia,
a pesar de todo, tú pudiste más,
porque venciste al tirano que aún nos impone las cadenas
que tú intentaste romper,
las cárceles que quisiste destruir,
en ese campo de exterminio pasivo,
que es nuestra Isla,
aislada del resto del continente
día tras días, años tras años,
décadas tras décadas......
Por Luan Vidad
© Derechos reservados por el autor.
Comparto tu dolor y el dolor de muchos cubanos, Luan Vidad, una muerte anunciada, los que lo querían, sienten una perdida irreparable, a otros les deja el camino libre, nunca podrán sustituirlo, hombre cabal, inteligente, valiente , cualidades que muchos no perdonan y crea enemigos poderosos.
Un abrazo en este día de luto para los buenos cubanos.
Bellos como siempre tus versos auténticos de un gran poeta como tú, mi maravilloso amigo, siempre te recuerdo con un sentimiento muy especial.
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