Entrevista a Manuel Cruz, autor del libro, "Amo, luego existo, los filósofos y el amor"
A todo el mundo le gusta estar enamorado, el amor alimenta
la fantasía de poder ser otro sin dejar de ser uno mismo
Entrevista a Manuel Cruz,
autor del libro, “Amo, luego existo”
Manuel Cruz es Catedrático
de Filosofía contemporánea en la Universidad de Barcelona, profesor visitante
en varias universidades europeas y americanas, investigador en el Instituto de Filosofía del
CSIC, en Madrid. Es autor de una veintena de libros, pero ahora viene a
hablarnos del amor con su libro "Amo, luego existo, los filósofos y el
amor", Premio Espasa de Ensayo 2010.
Cuando leí algo sobre este
autor, yo que soy una enamorada del amor, en encontré con la horma de mi zapato
y no pare hasta oírlo decir muchas de las cosas que nos narra en su libro Amo,
luego existo, los filósofos y el amor" y nada mejor que la interesante
entrevista que le hicieron en el periódico El País donde el periodista no deja nada por preguntar,
pero antes un adelantito del libro que para mí ha sido muy refrescante es
lectura después que quise meterme con los filósofos posmodernistas y todas sus
citas y enredos , me fui en busca de los filósofos hablando en el tema del
amor, algo alejados de la razón para darle paso a las emociones y sentimientos,
en un lenguaje directo, pero no carente de las maravillas que el amor siempre
nos ofrece, muy importante es amor de hoy, como hemos ido evolucionando en sus
conceptos para al final caer rendidos como los primeros seres terrenales que
sucumbieron al amor, no dejen de leer la entrevista, aunque se salten estas
cosas que les sugiero, pero como ya llegaron hasta aquí, un abrazo y ya medirán
de este autor tan listo y atrevido, filosofo, profesor y muchas cosas más, oigámoslo…
Pero primero, algunos
detalles para que el disfrute de la entrevista sea completo.
El autor de “Amo, luego existo”,
nos lleva a la evolución que ha sufrido el amor a lo largo de la historia
y explora que pasaba con los grandes
pensadores, filósofos, científicos y el
amor, según él los estoicos lo hacían
con paciencia y los nihilistas con pesimismo
pero lo más importante es cuando se detiene en el hombre de hoy, observa
que es muy exigente en la calidad del amor, un solo problema es que cada día
quiere pagar menos él.
En la sociedad posmodernista los amantes son disfuncionales, contradictorios, pero se ha
idealizado a la pareja ideal,, buenos amigos, amantes apasionados,
excepcionales, pero el costo afectivo y personal ha perdido valores, lo que
hace que en muchas ocasiones las parejas se sientan frustrados, aunque si llega
a la conclusión que la emoción profunda que produce la satisfacción del amor no
ha encontrado ningún sustituto, desde el punto de vista del consumismo o del
mercantilismo, el amor sería un fracaso, pero todos seguimos apostando por ese
sentimiento, el amor se ha convertido
casi casi en una cuestión de supervivencia.
Entrevista a Manuel Cruz autor de AMO, LUEGO EXISTO
Entrevista a Manuel Cruz autor de AMO, LUEGO EXISTO
Encontrará un
recorrido por la historia de la filosofía, que consiste en una serie de calas
en diversos momentos de la historia del pensamiento occidental que corresponden
a autores o parejas de autores que por alguna razón, ya sea por su aportación
teórica, por su propia experiencia amorosa, o por ambas a la vez, han terminado
siendo identificados con la problemática amorosa, como en el caso de Platón, San Agustín, Abelardo y Eloísa, Spinoza, Lou Andreas Salome y Nietzsche, Jean Paul Sartre y Simone de Beauvoir, Martin Heidegger y Hannah Arendt,y Michel Foucault.
2. El
amor es un tema que actualmente se aborda desde la frivolidad, alejado de la
filosofía…
Es cierto que el
amor ha estado desigualmente presente en nuestra cultura. Siempre ha estado muy
presente en la cultura popular, no sólo en las telenovelas; pensemos en la
música popular, por ejemplo. Una vez que la canción de protesta prácticamente
ha desaparecido, de qué otra cosas hablan las canciones sino del amor. En el
cine la presencia del amor es muy fuerte, pero se ha tendido a pensar en el
campo de la cultura superior que el amor es cuestión de otras disciplinas. Si
hiciéremos una encuesta en la calle y le preguntáramos a la gente cuál cree que
es el saber o el campo del saber que mejor ha tratado al amor, la inmensa mayoría
respondería que la poesía, a continuación la novela, después la música, y en
cuarto o quinto lugar dirían que la filosofía, pues se ha considerado que el
amor es un tema menor para la filosofía junto con la emoción, los sentimientos,
aunque en los últimos años la tendencia tiende a corregirse.
3. Pareciera
que los filósofos son personas que no se enamoran. Quizá Amo, luego existo pueda aproximar el mundo de la filosofía a quienes
se sienten ajenos a ella…
Qué duda cabe que
hay toda una serie de clichés respecto a los filósofos, como los hay con los
científicos, a quienes la gente considera como personas que están todo el día
en sus particulares nubes, en sus laboratorios, etc. A los filósofos también se
les aplican una serie de clichés que espero mi libro pueda anular. Pero hay un
elemento más con respecto de los filósofos: que un botánico no hable del amor
no tiene ninguna importancia, pero que un filósofo que reflexiona sobre
el ser humano no hable de una de las experiencias más básicas, más
constituyentes del ser humano, como es la experiencia amorosa, eso sí sería un
poco grave.
Se trata de una
relación fracturada, paradójica. Nietzsche tenía una aspiración absolutamente
convencional, utópica, pequeñoburguesa, de cómo debía ser su vida amorosa. En la
correspondencia con la mujer de Wagner, con su hermana o su madre, él habla en
términos convencionales, del tipo de “He de encontrar una mujer buena,
hacendosa, rica, que me cuide y que me permita trabajar y escribir mis libros”.
En boca del gran crítico de la modernidad suena un poco extraño. Cuando él vive la pasión
amorosa, la vive intensamente. No la vive como la relación típica del que
quiere simplemente ordenar su vida. La vive a fondo. Lo cual no significa que
esa dimensión apasionada sea una dimensión exenta de contradicciones y
problemas. El reproche que Lou Andreas Salome le hace a Nietzsche es el mismo reproche que Nietzsche le hace a Lou: los dos se acusan de ser egoístas. Nietzsche inicia una relación apasionada con Lou que no culmina, se queda en la fase inicial,
la que un sicoanalista llamaría meramente narcisista. Nietzsche lo reconoce: le encanta que una mujer como
Lou, guapa, inteligente, admirada, pueda ser su discípula, su albacea testamentaria,
su sucesora. Es una fascinación muy narcisista. En Lou encontramos la otra cara
de la moneda: a ella le encanta que un intelectual tan destacado, prestigioso y
vanguardista haya reparado en ella, la acepte como interlocutora. Hay un juego
especular, diría un filósofo metafísico: ambos se usan como un espejo para
contemplarse a sí mismos, verse atractivos, favorecidos, destacados.
5.
De los autores que aparecen en el libro, ¿quién sufrió más por
el amor, o quién encontró el amor verdadero?
La mayor parte de
ellos sufrieron por el amor de alguna manera. Particularmente me llama la
atención el sufrimiento de Hannah Arendt, una mujer que en los años veinte, siendo
estudiante de filosofía, judía, se enamora de un joven profesor emergente,
destacado, de moda, que aparecía como la gran promesa de la filosofía alemana: Martín Heidegger. Ambos sostienen una relación apasionada que
termina hacia finales de los veinte. Ella se casa con otra persona, estalla el
nazismo, huye junto con su madre a París, donde al llegar la ocupación alemana
es detenida e internada en un campo del que se escapa y se exilia en Estados
Unidos con su segundo marido, donde sufre miles de situaciones penosas pues no
conoce la lengua y tiene que abrirse camino poco a poco. Al término de la
Segunda Guerra Mundial, Heidegger es expulsado de la universidad al
demostrarse que había sido miembro del partido nazi. Hannah Arendt, en los años
cincuenta viaja a Europa y se reencuentra con él. Ella ya no es la joven
fascinada por su profesor, es una mujer que ha sufrido mucho por ser judía. Ahí
hay una dimensión dramática, no sólo de las personas, sino de toda un época.
Probablemente
sólo Abelardo y Eloísa tuvieron una relación de plenitud amorosa. Es probable
que la correspondencia entre ambos sea una construcción hecha por una persona.
Si creemos que es verdad, es lo más cercano a una pasión, con sus dramatismos y
problemas, a una relación que se mantiene. En la relación de Jean Paul Sartre y
Simone de Beauvoir, mi opinión personal es que entre ellos había una cierta
dimensión sórdida.
6. Uno
de los epígrafes que acompañan al libro, usted retoma la frase de una canción
de Álvaro Carrillo, ¿por qué? ¿Les gustan los boleros?
De los mil
matices que tiene la experiencia amorosa, los boleros me parecen extremadamente
ilustrativos. Por sí mismos los boleros constituyen un género literario, por
así decirlo, donde los poetas que se lanzan a escribirlos lo hacen
decididamente para mostrarnos los mil matices de la relación amorosa: el amor,
el desamor, el engaño, el desengaño, la añoranza del ser amado, la pasión
desenfrenada, el descubrimiento del amor. Si hubiera un libro que reuniera
todos los boleros que se han escrito ese libro sería una enciclopedia de la
experiencia amorosa.
7. Invite
a los lectores de Más Cultura para que se acerquen a Amo, luego existo, y de esa forma a la filosofía…
Este es un libro
de Historia del amor, no de Arqueología del amor. Sólo podemos entender la
naturaleza del amor hoy, con todos sus problemas, sus matices, sus
contradicciones y dificultades, si entendemos cómo hemos venido a parar aquí.
Sólo el pasado nos proporciona los elementos para entender la densidad del
presente. Quien no conoce el pasado vive, forzosamente, en la superficie del
presente, no conoce el espesor; para conocerlo hay que echar la vista atrás,
así entenderemos en qué medida somos el efecto, el resultado, la desembocadura,
de lo que han hecho, vivido, sufrido y, en este caso, amado tantos hombres y
mujeres. Me gustaría que leyeran el libro para ayudar a entender lo que nos
pasa cuando amamos y somos amados. En octubre viajaré a México para saber
si esta especie de modesta semilla de reflexión y pensamiento acerca del amor
que he intentado sembrar, da algún fruto en términos de diálogo, discusión,
debate o, como mínimo, conversación.
La entrevista fue tomada de este sitio . |
CONSIDERO EXTRAORDINARIO QUE EL TEMA DEL AMOR SE LLEVE A LA FILOSOFIA, Y, SOBRE TODO, QUE ASI LA ENCUENTRE EL PUEBLO, LA GENTE.....LLEVADO A UN GRADO FILOSOFICO NO ES LA POESIA, LA PROSA POETICA, LA NARRATIVA...ESTO SERIA COMO LA "EXPLOSION SENTIMENTAL DEL AMOR", EN LA LITERATURA ARTISTICA...PERO EN ESTOS TIEMPOS, DE GUERRA, DE MOMENTOS TURBIOS, DE MIEDOS, SI CREO QUE EL HOMBRE HA TOMADO, COMO ALGO ESENCIAL EN SU QUEHACER DIARIO AL "AMOR"......DE AHI QUE SERIA MUY DE BUEN GUSTO , Y MAS DE NECESIDAD, QUE ESE "REFUGIO HUMANO ACTUAL", SE VALORICE COMO UN COMPORTAMIENTO DEL SER DENTRO DE LA VIDA, DE LO DIARIO, DE SU FILOSOFIA ELEMENTAL, PORQUE LO ES...ESO ES INNNEGABLE....SI ANTES SE TOMABA EL "AMOR" PARA EL "AMOR MISMO"; AHORA EN EL ALTO VALOR QUE LE HA TOCADO EN LA HISTORIA, QUEDA SUCIENTEMENTE "POBRE" PARA DEJARLO EN UN PLANO LITERARIO BELLO...HAY QUE LLEVARLO A LA PROPIA FILOSIFIA EN QUE HA ENTRADO A FORMAR PARTE YA HACE UN TIEMPO,,,,ES COMO PLANTEARNOS LA FILOSOFIA DEL "HOMBRE ANTE SU MAL O SU BIEN"......PLENAMENTE ESTOY DE ACUERDO CON LO QUE SE PLANTEA EN LA ENTREVISTA...NO HAY DE OTRA.....Y QUE COMIENCE EL AMOR A SER PARTE DE UN ESTILO DE VIDA, DE UNA FUENTE A SEGUIR CORRECTAMENTE.....MAGNIFICOS CONCEPTOS EN LA ENTREVISTA....CON TODO MI AMOR...MA. DE LOS A.MIRO VILLASANA
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