Y cada uno a su zapato.
Ellos conspiran con impunidad, sabiendo que tienen sus pecados a buen recaudo, saben cuál es su rol en esta saga y de qué tratan los conflictos en los círculos del Congreso y son conspiradores que sienten que hay un PRESIDENTE, si no el mejor como creen que fue Obama, quien se bajó los pantalones con los enemigos históricos de los EE.UU, todos lo recordamos pero este es diferente que a su manera, criticables y condenables, entonces apuntan sus armas, sus atajos y vilezas, son viejas rencillas entre dos partidos que se disputan cada cuatro años el Gobierno del país más poderoso del mundo y se vuelcan en dimequetediretes, muy al estilo latino y no les cuadra que quien ejerce el poder haya conseguido llevar al país a un estado de abundancia y de equilibrio, después que no consiguieron sus propósitos de llevar a la Primera Magistratura a la corrupta Hillary Clinton, todas las pruebas que la inculpaban, como poner en riesgo la seguridad del país, desaparecieron por arte de magia, ya no es tema para las redes, ni de periodistas furibundos, tampoco oímos de policías que matan a negros inocentes, ni a negros rompiendo vidrieras, eso pasaba con el anterior presidente bueno, tan racista como éste pero del otro lado, tan antimigrante como éste, pero sin censores ni furiosos defensores de los derechos humanos, estos eran menos humanos, y pensar en tantos niños separados de sus padres en un número significativo durante el gobierno anterior y solo con una prueba de ADN , pueden reunificarse con su familia, nadie los ha reclamado y mintieron cuando dijeron ser sus padres, no lo eran.
Paren y piensen más en el país que en sus intereses de cualquier índole, una historia, bien contada los va a condenar y hacer responsables de crear todo este caos que no se sabe hasta dónde va a llegar. Por Dios, que ustedes dicen creer en él, paren y contribuyan al libre desarrollo del país y ocupense de sus conflictos internos que nadie se los piensa resolver y cada uno a su zapato.
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