Felicidades a mi padre y a mi tío que vislumbraron lo que se nos avecinaba. Feliz dia de los padres.


En las afueras de Jagüey Grande, batey La Yuca.
Provincia de Matanzas.

Esta foto siempre la guardo como una reliquia, la palabra ahora me suena  algo anticuada, pero me gusta eso de reliquia, se la sentía decir mucho a mi mama, pues bien más que una reliquia ahora cuando la fotografía empieza a opacar su valor puramente icónico ante mis ojos asombrados, se va convirtiendo en una parte de la historia de mi país, Cuba, la escena constituye un cuadro costumbrista, toda una saga, mi tío Antolín Lima, el hermano mayor de mi mama, el típico guajiro cubano y mi papa. Jesus Miguez Otero, de Santiago de Compostela, La Coruña el gallego que vino a Cuba muy joven a hacer las Américas y regresar a España con plata. No se cumplió el sueño de mi papa, los cubanos sabemos que nos pasó y  mi tio vio  a algunos de sus hijos perseguidos y chivateados por personas que se conocían de toda una vida, ademas abandonaron el campo y las siembras y las crías de animales se acabaron para ellos, fueron al pueblo a trabajar en la construcción ....No quiero cansar con flores negras, ni con estos recuerdos.


 Ellos, conversaban debajo de una mata , no sé de qué, árboles de Cub, puede ser de aguacate, de mango, de chirimoya...Era la década de los 60. Como no sabemos de qué hablaban, yo casi pueblo adivinar  que era de política, de economía, de  los rebeldes o barbudos de Fidel.

Ahí los vemos sentados en sus taburetes,  ellos trazaban el destino de la isla y de lo que estoy segura que ninguno de los dos era optimista con lo que nos esperaba, mi papa sabia que era comunismo desde el primer dia, mejor al otro que oyó hablar al comandante y mi tío observaba cómo repartían las tierras y se la quitaban a sus dueños, un destino para nada paradisiaco como nos lo pintaban los recién llegados para gobernar a la isla que la vida nos demostró que solo miseria y muerte nos trajeron y aun siguen repartiendo a los que viven alla y a los que vivimos ahora como mi padre emigrantes, sabemos que el precio ha sido muy alto que seguimos pagando.

La foto tiene un lenguaje oculto mágico y real. No es un lenguaje articulado , por lo que no resulta fónico, habla el lenguaje de la imagen artística , de la que hablaba Lezama , el poeta que sería condenado al ostracismo junto con muchos de su generación.

Pareciera casi lo más importante para mi fuera la presencia de ellos tan queridos en en mis recuerdos, hora la imagen se me ha ido convirtiendo en un documento cargado de historia y mi tío y mi padre, que hasta se me olvidaba felicitarlos por el dia de los padres, dos personajes de una historia en una imagen evocadora de dos símbolos de la sociedad cubana en la década de los 60, mi tio Tin, guajiro cubano y mi padre Miguez, emigrante gallego.
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FELICIDADES PAPAS.

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