El coronavirus: realidad y ficción.

Sin dudas  el coronavirus ¿Una amenaza para la vida?  ha puesto a prueba al mundo nuestro, el de los seres humanos, sentimos que la vida se puede ir así de simple y se nos desmorona a los pies, ni reyes, ni curas, ni ladrones se escapan de su poder destructivo, la muerte acechando, con su guadaña invisible, con una mueca burlona nos  advierte que las bombas atómicas están obsoletas, pueden convertirse en instrumentos en desuso y ahora otros tienen la última palabra y un ejército de microscópicos soldados armados para una guerra, que sólo en ficción la habíamos afrontado con estas dimensiones, está listo para el combate ¿El último?

Los religiosos dirán es una prueba y no me creo capaz de desmentirlos, todo cabe cuando se rompen las reglas entre la ficción y la realidad y de pronto Julio Vernes es un profeta y los guionistas y escritores de ciencia ficción, pueden vaticinar acontecimientos donde ellos son los gurús absolutos George Orwell, Isaac Asimov, Frank Herbert, Spielberg, solo por mencionar algunos, la lista sería impensable.

"Cuidense y sean verdaderos "compañeros", salvemos ese vocablo de quienes intentaron usarlo para su uso exclusivo. Al coronavirus lo venceremos, amamos la vida, amamos al planeta, amamos al prójimo como a uno mismo y ahora me viene a la mente un hombre, Jesús, el Nazareno, el que caminó por la mar, el pescador, el profeta que nos enseñó a amar y a compartir los panes.

Si bien es una desgracia que nos aterra, como dicen algunos filósofos anónimos otros no tan anónimos ( Nietzsche) para bien o para mal y lo que pasa conviene, que dejan huellas y verdades entre los hombres. Nos convierte en iguales entre si y aquello que decían los comunistas que todos somos iguales pero hay otros más iguales entre si, se les acabó la historia, ahora es otra