El patio de mi casa es particular.

A veces un poema es un pretexto, un toque mágico, una paloma que se extravió, que descubres en las ramas de un arbol tal vez en el mas viejo o en las aguas del rio, o en lugares que puede ser el patio de tu casa y descubres que ya no es particular, ahora tiene un dueño y los pájaros rojos pusieron lo cerrojos  y como las estatuas del parque al paso del tiempo que ya nadie recuerda, así quedara este poema en algún rincón, aunque ahora en este patio jueguen los niños, el poema que un día alguien grabó en el viento ahi estará en todos los rincones para siempre como el viejo can que espera por su amo que ya no volverá, el también espera...

No, no existen días malditos a veces hemos llegado 

y no lo sabemos, somos cómplices del silencio 

porque hemos aprendido a romper los hechizos.

Y en todos esos naufragios alguien 

ha estado a tu lado... te sabe de memoria

No, no son alucinaciones surrealistas 

es alguien que desde el silencio... 

te ve, te oye, te escucha

Y sabe que existes y siente que estas ahí.